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Se sabe que cada Senador maneja mensualmente mucho dinero para ayuda a Instituciones ó personas, pero lo que no se sabe es de cuanto es esa cantidad. Así es, ni siquiera yo que soy candidato, sé de lo que dispondría en caso de ser electo. De más está decir que ese importe, es dinero que la gente aporta con mucho sacrificio en forma periódica al pagar sus impuestos, y es por eso que básicamente, y en un marco de transparencia institucional, en el caso de que los vecinos me elijan, voy a informar en forma clara y de fácil acceso para todos, “cuanto es el importe del que se dispone; que cantidad se distribuye; quienes son los beneficiarios y fundamentalmente, cuál es el destino a que van a ser utilizados en cada caso. En épocas de discusiones paritarias, se lo escucha decir a nuestro Gobernador, el Ing. Miguel Lifschitz: “a cualquiera le gustaría dar un porcentaje alto de aumento a los empleados públicos, pero aclara que lo que él administra son dineros del pueblo y debe ser responsable en el gasto de los mismos”. En esa misma sintonía, considero que como Senador también administraría dineros públicos y debo ser no solo responsable, sino eficiente en el uso de los mismos. Por eso, es mi propuesta mantener las actuales ayudas que se dan a Instituciones, pero informar de las mismas a la población, y descartar todo programa que sea meramente populista y clientelar, para ir en busca de propuestas superadores como el de entregar BECAS ESTUDIANTILES a aquellos jóvenes, que hoy no pueden acceder a una carrera. EN MOMENTOS EN QUE CRECE EL DESCREIMIENTO A LOS POLÍTICOS, ESTOY CONVENCIDO QUE ESTA PROPUESTA DE TRANSPARENCIA Y EFICIENCIA EN EL MANEJO DE RECURSOS QUE LE PERTENECEN A LA GENTE, ES UNA MANERA DE DEMOSTRAR QUE PODEMOS VOLVER A CONFIAR.