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¿Esperanza ha ingresado por completo al Siglo XXI? ¿Queremos una ciudad inteligente? ¿Se piensa en el futuro de la ciudad?
En el transcurso del año 2020 el Concejo Municipal, mediante la aprobación por unanimidad de minutas de comunicación y ordenanza respectiva, expresó su apoyo y acompañamiento al trabajo desarrollado por la Municipalidad de Esperanza con la UTN (Universidad Tecnológica Nacional-Facultad Regional Santa Fe) y la FESTRAM (Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales de la Provincia de Santa Fe).
 
El mencionado trabajo se realizó en el marco del programa “Unidos por ciudades inteligentes y sostenibles” (U4SSC) de la UIT (Unión Internacional de Telecomunicaciones), la CEPE (Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa) y ONU-Hábitat junto con otros órganos de las Naciones Unidas que responden, entre otros, al Objetivo de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 Nro. 11: “Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles”.
 
A principios del presente año ya podemos disponer del Informe de Verificación publicado por la UIT en el que encontraremos el resumen de la aplicación de los Indicadores Fundamentales de Rendimiento (IFR).
Agrupados bajo las dimensiones Sociedad y Cultura, Medio Ambiente y Economía, este conjunto de Indicadores fue elaborado con el objetivo de establecer los criterios necesarios para evaluar las tecnologías de la información y comunicación (TIC).
 
·         Entre las actividades de evaluación realizadas se encuentran:
·         Estudio de factibilidad de indicadores fundamentales de rendimiento (IFR)
·         Recopilación, cálculo y revisión de datos relativos a los IFR.
·         Entrevistas con partes interesadas de la ciudad.
·         Verificación de la adecuación de los datos presentados a los requisitos de la metodología de recopilación de indicadores fundamentales de rendimiento para ciudades inteligentes y sostenibles.
·         Auditoría de indicadores.
·         Redacción de informe y presentación.
 
La ejecución de esta primera etapa culmina con recomendaciones por parte de consultores externos de la UIT, en las que se sugiere continuar con el relevamiento de la información y se plantea la necesidad de centrarse en los indicadores que han evidenciado un bajo rendimiento, determinando cuáles de ellos deben estar sujetos a importancia crítica para la ciudad y a elaborar planes de mejora.
 
En estas épocas de alta complejidad se escuchan voces que sostienen que la emergencia y las necesidades deben priorizarse por encima de las actividades prospectivas y de planificación.  Las urgencias y las demandas del día a día generalmente ocupan gran parte de las agendas de los distintos niveles de gobierno, pero ello no debe ser utilizado como excusa para postergar las actividades de análisis y proyección.
 
El trabajo conjunto con instituciones de prestigio académico vinculadas a organismos internacionales que las respaldan, es una muestra de cómo el gobierno (en sentido amplio: Ejecutivo y Legislativo) de una ciudad como Esperanza, puede comprometerse y ocuparse de su propio futuro en medio de una inédita crisis como la provocada por el COVID 19.
 
Relevar datos, proyectar y actuar. El futuro de una ciudad debe ser planificado, más aún cuando surgen desafíos nuevos e inesperados.